martes, 7 de enero de 2020

El regadío y la protección medioambiental del Mar Menor

El final de 2019 ha sido totalmente adverso para el regadío del Campo de Cartagena, con unas perspectivas nada halagüeñas para este 2020. Donde la Administración parece dar a entender que no apuesta claramente por la compatibilidad de este regadío con la protección medioambiental del Mar Menor. Por ello conviene recordar que un estudio de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT), redactado por los Catedráticos Victoriano Martínez y Bernardo Martín, muestra que el regadío y el Mar Menor son totalmente compatibles si se realizan las infraestructuras necesarias. A este respecto, según el Catedrático Juan José Martínez hoy en día la actividad agrícola en el Campo de Cartagena en sí es totalmente sostenible a nivel de parcela.


Por tanto, no se entiende como todavía no se han ejecutado aquellas actuaciones que llevan planteadas hace décadas, que eliminarían en gran parte la posible afección del regadío al Mar Menor. Por ejemplo:

  1. La Resolución de 8 de mayo de 2006 de la Secretaría General para la Prevención de la Contaminación y el Cambio Climático, por la que se formula declaración de impacto ambiental sobre la evaluación del proyecto de Ampliación de la Estación desaladora de Aguas Salobres de El Mojón y sus colectores.
  2. Ley 26/2009 del 23 de diciembre de los Presupuestos Generales del Estado para el año 2010 que recoge la Declaración de interés general de las obras de 'Recogida y eliminación de las salmueras procedentes de la red de desalobradoras del Campo de Cartagena y su vertido al Mar Mediterráneo'.
  3. El Programa de Medidas (Anejo 10) del Plan Hidrológico de la Cuenca del Segura 2009/15 incluía las siguientes actuaciones:
  • Construcción de salmueroductos que recojan los vertidos de la desalinizadoras privadas del Campo de Cartagena.
  • Defensa de actuaciones frente a avenidas y protección de Mar Menor en el Campo de Cartagena Horizonte 2021.
  • Defensa de actuaciones frente a avenidas y protección de Mar Menor en el Campo de Cartagena Horizonte 2027.
  • Ejecución de una batería de pozos perimetrales en la línea de costa del acuífero del Campo de Cartagena para extracción de 5 hm3/año en primera fase y 5 hm3/año en segunda fase.
  • Ampliación de la desalobradora del Mojón y su red de colectores para desalinización de los retornos de riego recogidos en los drenajes del Campo de Cartagena.
  • Actuación de desnitrificación de los recursos subterráneos captados por la batería de pozos perimetral del Campo de Cartagena y posterior vertido al Mar Mediterráneo.

Más incomprensible aún es que el pasado 17 de diciembre de 2019, el Ministerio para la Transición Ecológica (MITECO) justificó su decisión de no aprobar un Trasvase para todo el regadío del Levante: “una de las mayores presiones al Mar Menor es la de la contaminación difusa procedente del regadío en el Campo de Cartagena”Pero esta decisión de Trasvase 0 para el regadío es totalmente contraproducente con el Mar Menor. Dado que de acuerdo con el Catedrático de Ecología de la Universidad de Murcia, Ángel Pérez Ruzafa, la solución para el Mar Menor no es el Trasvase Cero, sino bajar el nivel freático. En esta línea el Dr. Ingeniero Agrónomo Pedro Fernández señala que por cada hm3 extraído de acuífero cuaternario para uso agrícola se recuperarían un total de 42 t N (186 t NO3-). Además al reducirse considerablemente los recursos hídricos de calidad de los que podría disponer la Comunidad de Regantes del Campo de Cartagena, haría imposible que se pueda aprovechar el agua con una alta salinidad de las depuradoras y el agua captada del ¨bombeo del Albujón¨, produciendo que las mismas puedan terminar en este ecosistema único. Asimismo, los regantes a disponer de aguas con una alta salinidad, se verían forzados aplicar fracción de lavado en sus riegoscon las pérdidas por percolación que ello ocasionaría, pudiendo acabar este exceso de riego en el acuífero.

Por otro lado, el 27 de diciembre se publicó en el Boletín Oficial de la Región de Murcia (BORM) el Decreto-Ley 2/2019 de Protección Integral del Mar Menor, donde se señala que el grave problema que sufre el Mar Menor se debe a la puesta en regadío del Campo de Cartagena, incluso en su artículo 27 da preferencia al secano frente al regadío, sin considerar que unas prácticas adecuadas en un cultivo de regadío pueden tener menor impacto ambiental que uno de secano, y que una hectárea de regadío puede generar hasta 50 veces más empleo que una de secano. Además, en su artículo 15 (Plan de Ordenación Territorial de la Cuenca Vertiente del Mar Menor), se indica que se deberá producir una adaptación de los usos agrícolas a usos de carácter ecológico, forestal y turístico, lo conlleva un cambio de uso de 3.230 ha de la superficie regable de la Comunidad de Regantes del Campo de Cartagena. La gran mayoría de esta superficie afectada se ubicada en los sectores 2, 3, 5, 17 y 18 de la Zona Regable Oriental, esta zona fue declarada de interés general, en base al Decreto 693/72 de 9 de marzo. Parece que no existe justificación técnica para esta delimitación propuesta en este artículo 15 (polígono delimitado al Norte por la línea límite con la provincia de Alicante, al Oeste por la Autovía AP-7, al Sur por la carretera RM-12 y el Camino de Calarreona y por la línea litoral del Mar Menor y del Mar Mediterráneo), porque afecta a parcelas que se encuentran a más de 6 km de distancia del Mar Menor, mientras que no perjudica a otras que están a menos de 2 km.

No puedo compartir lo indicado por el Decreto-Ley 2/2019, además de lo que he señalado, porque de acuerdo con lo apuntado por el Informe integral sobre el estado ecológico del Mar Menor, elaborado por el Comité de Asesoramiento Científico del Mar Menor, en su capítulo 5 (Depuración y Descontaminación de Aguas):

  • Las fuentes principales de los elementos causantes de la eutrofización son: las aguas de diferentes orígenes como agrícola, residuales urbanas, y las aguas procedentes de escorrentías causadas por lluvias torrenciales; además de la deposición seca de los óxidos nitrosos de motores de combustión interna; así como los vientos saharianos que aportan hierro. Las aguas proceden: de drenajes de parcelas agrícolas, escorrentías de lluvias, desbordes de alcantarillado municipal y de aguas subterráneas.
  • De datos históricos, el 50% del nitrógeno inorgánico disuelto proviene de fuentes agrícolas (regadío y ganadería), mientras que el 70% del P total y el 91% del carbono orgánico provienen de fuentes puntuales urbanas.

Hay que recordar que la alta carga de nutrientes que presenta el acuífero puede no deberse al actual regadío de precisión del Campo de Cartagena, con una alta tecnificación (más de 96% con riego localizado), sino a malas prácticas agrícolas de hace décadas (riego por superficie con gran aporte de nitratos), ganadería, y vertidos de aguas urbanas. Según Alejandro Pérez Pastor, Catedrático de la Universidad Politécnica de Cartagena, en el Campo de Cartagena se están aplicando las técnicas más avanzadas de riego y fertirrigación del mundo, lo que posibilita una agricultura de regadío sostenible y compatible con el Mar Menor.

Esta tecnificación parece dar sus frutos, un estudio del Ministerio de Agricultura del 2015 (Caracterización de las fuentes de contaminación de aguas subterráneas mediante técnicas multisotópicas. Zona Vulnerable del Campo de Cartagena) indicaba un valor medio de 259 mg/l de nitratos en el acuífero cuaternario en el año 2001/02, mientras que en el año 2011/12 había descendido a 146 mg/l. Pero este descenso parece seguir continuando, dado que nuestra Corporación está llevando a cabo el Plan de Seguimiento y Vigilancia Ambiental de 131 pozos, según el último dato disponible de noviembre de 2019, el valor medio de la concentración de nitratos para el acuífero cuaternario era de 129 mg/l. Pero esta comparación de datos se debe analizar con cautela, dado que proceden de diferentes estudios, y no se trata de los mimos puntos. Pero muestran claramente, que es muy importante realizar la monitorización y seguimiento de los acuíferos del Campo de Cartagena. De acuerdo con José Luís García Aróstegui, Científico Titular del Instituto Geológico y Minero de España (IGME): "con mucho esfuerzo y perseverancia, quizás podamos llevar el Mar Menor a un punto de notable mejoría, pero el acuífero asociado lamentablemente no lo recuperaremos en décadas o tal vez nunca".

Para finalizar me gustaría resaltar que los regantes del Campo de Cartagena están dispuestos a realizar todo lo que este dentro de sus competencias para garantizar la salvaguarda medioambiental del Mar Menor y la compatibilidad de su regadío. Pero no entienden que se esté criminalizando al regadío, siendo más laxos con los impactos de otras actividades sobre el Mar Menor (vertidos urbanos, minería, desarrollo turístico, conectividad entre Mar Menor y Mediterráneo, actividades recreativas y deportivas, etc). Tampoco comprenden que la Administración no haya ejecutando todavía aquellas actuaciones necesarias que garantizan la protección del Mar Menor, lo que está poniendo en riesgo a esta joya de la naturaleza y a uno de los regadíos más tecnificados, productivos y sostenibles del mundo.

NOTA: Este post contiene gran cantidad de enlaces (color azul) a las fuentes de información empleadas para su realización.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario